La internacionalización del fútbol mexicano comenzó con el debut de la selección en un certamen oficial, al participar en él Torneo Olímpico de Fútbol dentro de los Juegos de Ámsterdam 1928. El 30 de mayo en el estadio Olímpico, México disputó su primer partido en una competición oficial frente a España en la fase de cuartos de final, duelo que terminó con una derrota para los mexicanos por 7-1, el único gol mexicano, y primero en competencias oficiales, camiseta españa fue obra de Juan «Trompo» Carreño. El meta del Atlético llegó incluso a evitar el 0-2 antes del descanso en otro unon contra uno.